La velocidad es una cualidad física importante en la práctica de cualquier deporte. La rapidez de un movimiento en las actividades deportivas es primordial, ya que su efectividad depende en gran medida de la velocidad con que se ejecute. Es la cualidad física que permite realizar acciones motrices en el menor tiempo posible. En esta modalidad podemos distinguir distintas clases de velocidad: Velocidad de reacción, velocidad de movimiento y velocidad de disparo.

La velocidad es otro pilar básico del tiro práctico, y es que de nada sirve hacer muchas “A´s” si no logramos obtener un buen tiempo. Por ello deberemos entrenar nuestra velocidad de manera que mejoremos la rapidez en nuestros movimientos, tiro y reacción.

Los desplazamientos en tiro práctico suelen ser cortos, normalmente entre 2 y 7 metros, por tanto nuestro entrenamiento se debe centrar en ejercitar nuestra musculación para adecuarla a este tipo de movimientos. Debemos realizar ejercicios anaeróbicos para aumentar las fibras rápidas de nuestros músculos como por ejemplo correr a máxima velocidad series cortas entre 30 y 60 metros, de 3 a 7 repeticiones con recuperación total. En el campo de tiro podemos realizar desplazamientos entre posiciones a máxima velocidad realizando dos disparos a un blanco en la posición final.

La reacción la podemos ejercitar con salidas desde distintas posiciones, entrenar la rapidez en el desenfunde con el timer es una buena forma de mejorar la reacción ya que acostumbramos a nuestro cerebro a responder a un estímulo inmediatamente.

La velocidad de disparo la podemos mejorar con la práctica, dos son los campos en los que podemos trabajar: las transiciones entre blancos y el Split del doublé-tap. Las primeras se pueden entrenar en seco realizando cambios de dirección en las cuatro coordenadas, siempre debemos intentar ganar velocidad en ellas cambiando lo más rápido posible pero debemos suavizar la llegada al siguiente blanco ya que si somos demasiado bruscos la inercia nos hará arrastrar el disparo y por tanto errarlo. El Split del doublé-tap es el tiempo entre los dos disparos que requiere cada blanco. Éste lo podemos igualmente entrenar en seco, aunque será más difícil poder valorar su resultado si no practicamos suficientemente con fuego real. Además, aquí entra en juego el control del retroceso, la dificultad estriba en saber combinar estos dos factores de manera que logremos obtener al mismo tiempo rapidez y buen control del arma.

Ejercicios: Desenfunde 2 disparos/blanco. 2 blancos a 25 y a 5 mts (2 repeticiones, lejos/cerca- cerca/lejos), 2 blancos a 10 metros con N/S en un angulo de 45º (2 repeticiones, izquierda/derecha-derecha/izquierda).